“Cuando volvamos a nuestras casas, podremos pintar las paredes y colgar arte”, explicó Christina Pineda. “Como inquilinos, no podíamos hacer eso. Son las cosas chiquitas que crean el sentido de hogar”. Con el apoyo de LISC, el Latino Economic Development Center (LEDC), y DHCD, Pineda y sus vecinos en 1445 Spring Road usaron sus derechos bajo de la ley TOPA de DC, para adquirir el edificio de 13 departamentos en el que viven, y convertirlo en una vivienda cooperativa; la Cooperativa HOPE.
Hoy en día, La Cooperativa HOPE está renovando el edificio, el cual ha presentado problemas por años debido a la mala administración. La Asociación de Inquilinos fue conformada en 2008 con el apoyo del LEDC. LEDC ayudó a los residentes a organizarse y reclamar ante el dueño del edificio, por su inhabilidad de mantener el edificio en buen estado. Con el apoyo y trabajo pro bono de los abogados de Latham & Watkins, la Asociación llevó a corte al dueño por los daños del edificio. La asociación obtuvo una sentencia favorable que les ayudó a modernizar el peligroso sistema eléctrico del edificio.
Se espera completar las renovaciones hacia finales de 2021. La Asociación de Inquilinos está siendo guiada por Michael Milliner y su equipo de desarrollo en Redvelopment Housing Advisors. Michael ayudó a los inquilinos a ver más allá de las paredes, y considerar también la estructura y los sistemas del edificio. Su apoyo fue esencial para adquirir recursos del sector público y privado, y ahora supervisa los trabajos de construcción y renovación. Los residentes desean volver pronto a sus hogares y están comprometidos con que todos los trabajos se hagan correctamente.
Ana Margarita Pineda, la presidente de la Asociación de Inquilinos, ha sido testigo de los drásticos cambios que ha tenido el barrio Columbia Heights durante los últimos 10 años. Cuando llegó a Estados Unidos de El Salvador con su hija Christina, solo conocía a unos pocos miembros de su familia. Sin embargo, en 1445 Spring Road Pineda se encontró con residentes de todo el mundo, incluyendo Latinoamérica, Asia, y África. Como dijo Tony Ma, un inmigrante de Vietnam quien ha sido residente de 1445 Spring Road por 17 años, “Acá vivimos como una familia. Nos ayudamos”.
Aunque al principio no fue fácil entender el proceso de la ley TOPA, los residentes decidieron aprender y superar cualquier desafío al que se enfrentaron. Pineda jugó un papel clave en la causa de la Cooperativa. Ella recuerda que al principio algunos residentes no querían dar su información personal a las agencias del gobierno e organizaciones sin ánimo de lucro debido a su estatus inmigratorio. Desafortunadamente, algunas de estas familias se mudaron del edificio o dejaron el barrio y DC completamente. Pineda reiteró que es importante que los residentes que están pensando en adquirir sus viviendas por medio del proceso TOPA sepan que “el estatus inmigratorio no tiene nada que ver con la vivienda. Y ninguna organización va a reportar a inmigración por el estatus inmigratorio. Que no tengan miedo. No tengan miedo de preguntar”.
El camino ha sido largo por La Cooperativa HOPE, un camino que ha sido aún más desafiante por la pandemia. Los residentes se mudaron a los departamentos temporarios y Milliner los mantuvo informados a lo largo del proceso. Debido a la pandemia, el precio de materias primas ha aumentado bastante, había una escases de materiales y trabajadores que se enfermaron de COVID. Todo esto resultó en la demora de la renovación.
A pesar los obstáculos, los inquilinos han mostrado resiliencia a lo largo del proceso. Christina Pina, hija de Ana Margarita, compartió que, aunque el periodo de tiempo ha sido más largo de lo esperado, el proceso ha acercado a los inquilinos. “Ya nos acostumbraron a las personas del barrio, a todo nuestro entorno - a tener la escuela cerca y la clínica. Le pone amor al edificio, hay muchos recuerdos aquí. Ser parte de esta cooperativa… no sería posible sin todas estas organizaciones y personas que nos ayudaron a lo largo del camino.”
El barrio de Columbia Heights en DC está cambiando rápidamente. El alquiler de un departamento de un cuarto en Columbia Heights está en aproximadamente $1,825, 49% más caro que el promedio nacional. Muchos residentes antiguos están siendo desplazados debido a los altos precios o son desalojados cuando se venden sus edificios. Este fenómeno ha afectado particularmente a las comunidades de color y las familias inmigrantes. Pero no en 1445 Spring Road.
Afortunadamente, Ana Margarita Pineda, su familia, y las otras 12 familias, ahora son dueños de su edificio. Como dueños, tienen control de su edificio y pueden tomar decisiones de maneras que antes no era posibles como inquilino. Esto incluye tener la autonomía de mantener los arriendos del edificio a un precio asequible y poder decorar sus hogares de la manera que quieran. Como compartió Christina Pineda “son las cosas chiquitas que crean el sentido de hogar.”
Es difícil explicar la magnitud de la travesía de los residentes de la Cooperativa HOPE a lo largo de estos cinco años. Al escuchar la historia de Pineda, los empleados de LISC, un miembro de DHCD, y Michael Milliner, nos mantuvimos en silencio, conmovidos por su vulnerabilidad y honestidad. Entendimos que tan monumental es este proyecto para los residentes de la Cooperativa.